Cómo elaborar un curriculum vitae

Primero planificalo

Un buen currículum debe tener en cuenta tus fortalezas, pero también debe adaptarse a los requerimientos del puesto de trabajo al que te querés presentar. Conocer la institución o sector donde vas a postularte, saber qué busca, te permitirá poner el foco en lo que podés ofrecer.
Por eso, no conviene confeccionar un currículum genérico y presentarlo para distintos empleos. De ser posible, armá CV específicos que se adapten a las distintas ofertas de trabajo. Así, solo pondrás la información pertinente. 
Prestá atención al detalle del puesto, los requisitos solicitados y qué habilidades requiere, y armá tu currículum destacando tu experiencia laboral previa o las destrezas que tenés afines a lo pedido.
Si no poseés los requisitos exigidos (experiencia previa, formación académica, por ejemplo), modificá tu CV para resaltar otros aspectos: enfocate en tus fortalezas, habilidades y objetivos. 
Hay otros aspectos clave que deberás tener en cuenta a la hora de armar el CV, como la redacción del contenido, el modelo o formato a elegir y su diseño. Te los mostramos en detalle a continuación.

Partes de todo CV

Aunque existen distintos tipos de currículum según el formato y el diseño, hay información que todos deben incluir, datos imprescindibles para quien hace la selección de personal. Se trata de las secciones básicas de todo CV (hacé clic acá para descargarlas).

Datos personales: tu nombre debe integrar el encabezado y verse bien. Luego consigná tu número de teléfono (chequeá que esté bien escrito) y tu dirección de correo electrónico, que debe contener tu nombre y/o apellido. Si no es así, te conviene hacerte uno nuevo. Incluí después los enlaces a tus cuentas en redes sociales profesionales (LinkedIn, Skype). Y no dudes en añadir la URL de tu blog o página web profesional, en caso de tenerlos. Evitá agregar datos innecesarios, como tu número de DNI o tu estado civil. Tampoco es obligatorio que incluyas tu fecha de nacimiento o edad. Si querés agregar una foto, esta debe ser del rostro hasta los hombros con un fondo liso.

Objetivos: una buena estrategia es definir tus propósitos personales, siempre que tengan relación con el puesto para el que te postulás. Los objetivos profesionales del currículum deben resaltar las capacidades y competencias que te distinguen. Añadí también brevemente qué podés aportar o esperás de la empresa o institución en la que deseás trabajar.

Experiencia laboral: quien se encargue de la selección de personal querrá saber si contás con experiencia, si estás trabajando actualmente o si estás sin empleo. El intervalo de fechas de cada uno de tus trabajos anteriores es importante. No te olvides de añadir en negrita el nombre de las instituciones para las que trabajaste e indicá qué función realizaste en ellas.

Formación académica: incluí un listado de tu formación académica organizada según su nivel de importancia y fecha cronológica de realización. Mencioná el título recibido, la institución y el año de finalización.

Formación complementaria: sea cual sea el proceso de selección al que envíes tu currículum, se toman en cuenta los cursos, la formación en idiomas e informática. Si los tenés, destacalos, mencioná su duración y su ámbito de aplicación o contenido. Evitá imprecisiones como poner, por ejemplo, «varios cursos de actualización», sin especificar detalles.

Modelos o formatos

La misma información puede presentarse de diferentes maneras según qué aspectos de tu presentación quieras destacar. Por ejemplo, podés elegir priorizar tu experiencia laboral o tus logros académicos. Los diferentes tipos de currículum permiten, mediante su estructura, esta organización. 
Tres formatos son los más utilizados y se diferencian en la manera de organizar la información: cronológico, funcional o temático y combinado.
Esta infografía te muestra sus características, ventajas y desventajas.

Diseño

El aspecto más importante es que resulte claro y de fácil lectura. Estas pautas de formato te ayudarán a lograr un buen currículum, conciso y bien estructurado:

• Sé breve (una o dos carillas como máximo).
• Utilizá papel blanco o claro, en formato A4 y de calidad, si es impreso.
• Seleccioná el mismo tipo de fuente (letra) para todo el documento, con un espaciado entre líneas que facilite la lectura. Respetá los márgenes y dejá espacio entre los párrafos.
• No lo escribas a mano, a menos que así lo exija la institución.
• Ayudate con negritas y destacados para lograr mayor claridad. Evitá, sin embargo, los adornos y no abuses de los colores.
• Imprimí una sola cara de la hoja. 
• Cuidá el estilo, la ortografía, utilizá sinónimos y evitá las repeticiones excesivas.

En este videotutorial podrás ver cómo ajustar el formato de tu CV. 

Herramientas para crear un CV

Una vez que planificaste tu currículum, planteaste sus secciones y lo ordenaste según el modelo elegido, ya estás en condiciones de crearlo.
En la actualidad contás con herramientas que te facilitarán la tarea. Podés utilizar, por ejemplo, las plantillas que te ofrecen algunos procesadores de texto o recurrir a herramientas en línea como CV Maker u Online CV, entre otras.
En este caso, necesitarás acceso a internet para navegar y te solicitarán ingreso con usuario de alguna aplicación (por ejemplo, Facebook o cuenta de Google), o tendrás que registrarte con tu dirección de correo electrónico. Estas aplicaciones te permiten crear tu currículum en línea completando plantillas predeterminadas (es posible escoger entre varios diseños), que luego podrás descargar o compartir a través de una URL. ¡Son muy fáciles de usar! En este videotutorial te mostramos cómo armarlo con CV Maker y en este otro cómo armar el currículum con Online CV. 

Para saber más

Accedé a dos propuestas formativas que te permitirán profundizar en este tema:

• Trabajo 2.0: CV y Entrevistas Exitosas
• Word 2010 Básico