Líquidos misteriosos

Hoy les traemos un experimento muy divertido. Solo van a necesitar algunos elementos que pueden encontrar en su casa y unos segundos de equilibrio. Sugerimos esta actividad a partir de los 8 años con la supervisión de personas adultas.

Invitamos a toda la familia a experimentar y divertirse.  Busquen un lugar cómodo, preparen los materiales y ¡manos al experimento!

¿Qué van a necesitar?

• 4 botellas iguales, preferentemente de plástico y boca ancha (o 2 botellas, y se realiza el experimento en dos etapas). También se pueden utilizar botellas de vidrio chicas o frascos de vidrio (como los de mermelada) del mismo tamaño, siempre bajo la supervisión de una persona adulta.
• 1 cartulina o alguna hoja de papel.
• 2 témperas o 2 colorantes comestibles de diferente color.
• Agua caliente (no mucha, para evitar quemaduras) y agua fría.
• 1 o 2 bandejas de plástico, platos o cualquier recipiente por si se cae un poco de agua.

¡Paso a paso!

Para empezar, reúnan los materiales necesarios y elijan un lugar cómodo de su casa. (Por las dudas, háganlo en algún espacio que pueda mojarse). 

1. Llenen dos de las botellas con agua caliente de la canilla (no hace falta que sea muy caliente) y las otras dos botellas con agua fría. Para que el experimento salga bien, es muy importante que estén llenas hasta arriba, justo antes de desbordarse.

2. Agreguen témpera de un color en las botellas de agua caliente y de otro color en las botellas de agua fría. En el ejemplo, se usó el amarillo para las botellas de agua caliente y el azul para las botellas de agua fría.

3. Coloquen una de las botellas de agua caliente en uno de los platos (u otro recipiente) y una de las botellas de agua fría en el otro plato.

4. Corten un cuadrado de cartulina o de papel que sea más grande que el pico de la botella y úsenlo para tapar la botella de agua caliente que no está en el plato.

5. Con mucho cuidado, den vuelta la botella y pónganla encima de la botella fría que está sobre el plato. Si el vaso está lleno hasta arriba, el papel se pegará y no habrá derrames.

6. Repitan el paso 4 y 5 para hacer el mismo procedimiento, pero ahora colocando la botella de agua fría (tapada con la cartulina) por encima de la botella de agua caliente.

7. Para terminar, con mucho cuidado retiren los cuadrados de cartulina que quedaron entre las botellas.

¡Ahora sí, ya estamos listos para observar qué sucede!

¿Qué pasó con el agua de las botellas? ¿Por qué en un caso se mezclaron los colores y en el otro, no? Si todo salió bien, cuando pusieron la botella de agua caliente arriba, los colores se mantuvieron separados. Pero, cuando pusieron el agua fría arriba, los colores comenzaron a mezclarse. ¿Se animan a explicar por qué? ¿Escucharon hablar de la densidad de los materiales? 

Si les interesa seguir investigando y divirtiéndose, los invitamos a realizar la torre de líquidos que proponen en la serie Desafiólogos de Pakapaka.

Sugerencias 

Ahora que terminaron con el experimento, ¡no tiren el agua de color!

Les dejamos algunas ideas para reutilizarla:

• Agreguen más témpera o colorante al agua y con un pincel o simplemente con las las manos creen una obra de arte única en una hoja nueva.
• Hagan pelotas de papel, sumérjanlas en el agua sobrante y usen esta herramienta de papel para pintar. 
• Mezclen los dos recipientes de agua y… ¡descubran qué color se forma!

Fuente de la imágenes: Exploratorium Teacher Institute.