Alessandro Baricco: la primera pandemia en tiempos de revolución digital

La cuarentena establecida para contener la pandemia de coronavirus COVID-19, obligó a cancelar la presentación que Alessandro Baricco iba a realizar en el marco de la mega exposición sobre Videojuegos: Gameplay 2020, organizada por el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona. 

La cancelación del evento presencial no fue un impedimento; la charla con Baricco se realizó a través “del pixel y la pantalla”, como dijo el escritor español Jorge Carrión, su entrevistador. Uno en Turín y el otro en Barcelona,  pulverizaron las distancias y superaron las cuarentenas con un encuentro virtual.

Esta conversación, que fluyó en una plataforma digital, se vincula directamente con el tema del último libro publicado por Baricco. En The Game (Anagrama, 2019), el italiano hace una arqueología del presente, cuyo recorrido inicia en la década de 1970 con el videojuego Space invaders para llegar hasta la inteligencia artificial actual y juegos como Alpha Go. Según Carrión, el libro de Baricco intenta comprender el nuevo paradigma, que él denomina The Game. Paradigma que despliega una sociedad, una cultura, una economía -en fin- una vida que ocurre en las pantallas, ya sea para uso lúdico, social y/o profesional.

Desde la pantalla de su computadora, vemos a Baricco decir:

Vivimos todo lo bien que podemos un momento extrañísimo que nadie se había imaginado nunca. Es como si hubiese ocurrido un accidente de coche, uno que se estrelló contra la pared y lo primero que hay que hacer es acudir con los médicos y salvar vidas humanas. Y la segunda cosa es pensar cómo es que llegamos a esta situación. Si conservamos la lucidez, si no nos dejamos enredar por el miedo, podremos pensar y entender cosas que son muy importantes y en este momento están visibles.

Según el escritor, las democracias en este momento funcionan, sobre todo, en situaciones de emergencia. Dice que en situaciones normales están siempre en crisis, en plena agonía, pero en ocasiones como esta se forma un nuevo pacto entre las élites y la gente, y el sistema social aguanta mucho. Baricco subraya cómo en situaciones de emergencia se subsana -al menos transitoriamente- esa falta de confianza en la clase política, en la dirigencia, en las instituciones e incluso en la ciencia. "Momentos de emergencia como estos, prueban que nuestra fórmula social da lo mejor de sí", destaca el educador.

Pero lo más importante para analizar, señala Baricco, es que el estado de emergencia será crónico y perenne, se trata de un proceso que ya comenzó: crisis económicas, terrorismo, explotación del planeta, calentamiento global, refugiados, es muy difícil recordar un período normal. Baricco arriesga la idea de que -tal vez- sea la única manera en que vivamos juntos, de este modo, afrontando emergencias que nos obligan a organizarnos, a tener una disciplina. Y afirma:

El coronavirus es el ensayo general de la auténtica emergencia crónica que vendrá después, cuando aceptemos la hipótesis de que el planeta se está muriendo. Probablemente nos pasaremos los próximos 50 años en esta única y gran emergencia que eclipsará todas las otras.

Respecto de las cuarentenas y medidas de contención para el COVID-19 que están tomando los países, Baricco observa que se deben cumplir, que todos tenemos que ser responsables por nosotros mismos y por los otros y que, si bien, es difícil vivir un tiempo aislados, las guerras fueron momentos todavía mucho más dramáticos porque nacían del odio entre los hombres; sin embargo, la humanidad pudo sobreponerse.

Para Baricco, la pandemia será el punto de inflexión a partir del cual probablemente comience una redistribución de la riqueza en el planeta porque la crisis económica que sobrevendrá será muy profunda. Llegados a este punto, Carrión le pregunta a Baricco cómo se relaciona el paradigma digital, el de las pantallas, el de The Game, con la situación actual y de qué manera -o con qué marcos teóricos- podemos pensar el presente. 

           El escritor explica:

Nada de lo que estamos viviendo hubiese sido posible antes de la revolución digital. Ni siquiera hace 20 ni 10 años atrás. Estamos viviendo la primera gran epidemia del Game, que es completamente diferente a cualquier epidemia precedente. Sabemos muchas más cosas que antes y podemos intervenir en la realidad con una velocidad que nadie había tenido nunca. Cerramos las fronteras de los países porque hoy podemos hacerlo, porque tenemos dispositivos digitales. Hace 15 años, no podíamos cerrar un país a esta velocidad porque la información era mucho más lenta, porque no disponíamos de las herramientas para vincular la experiencia directa con otras experiencias vividas y porque simplemente no habríamos sabido de la existencia de este virus. Sin el Game, donde la circulación de la información es tan veloz, sin estas tecnologías digitales, nunca habríamos visto imágenes de China en tiempo real. Esto nos va a lanzar al futuro definitivamente.

Baricco observa que la conversación por streaming que sostiene con Carrión será un formato cada día más habitual, plasmando algo que estaba en las posibilidades de la revolución digital y es poder interpretar a las tecnologías como prolongaciones del cuerpo. No como una máquina, sino como posibilidades de hacer cosas, de facilitarnos cosas, lo que denomina: humanidad aumentada.

Según el escritor, los jóvenes ya han internalizado estas posibilidades que brindan las tecnologías digitales y a los demás nos cuesta un poco más. Para Baricco ninguna de estas posibilidades digitales le privarán a él ni a nadie de encontrarse a tomar un café con otros y abrazarse. Cuando termine la cuarentena eso sucederá y nunca dejará de suceder. 

Baricco cierra el tema con esta reflexión:

Hay mucha gente que habla mal de la revolución digital pero en estos días nos damos cuenta que lo digital salva un montón de vidas. Les sirve a los médicos, nos ayuda. La piel digital y lo que podemos hacer con ella, nos permite en este momento ser comunidades sólidas, bastante unidas, comunicadas.