Fósiles en la Antártida
Las siguientes actividades elaboradas a partir de un capítulo del programa Aventura científica permiten comprender la importancia del estudio de los fósiles para saber cómo era el planeta hace millones de años y reflexionar sobre las disciplinas científicas involucradas en este tipo de investigación.
En la emisión «Fósiles en la Antártida» de Aventura científica, geólogos y paleontólogos buscan fósiles en la Antártida. Acompañamos a Marcelo Reguera y su equipo a recuperar un enorme reptil marino y a descubrir cómo era el continente helado hace millones de años.
La primera y la segunda actividad están destinadas a comprender por qué los científicos estudian los fósiles y cómo lo hacen. La tercera actividad propone recrear uno de los métodos que utilizan los investigadores fuera del laboratorio para realizar los denominados trabajos de campo.
Actividad 1: los fósiles
Luego de ver este capítulo de Aventura científica respondan las siguientes preguntas:
- ¿Qué son los fósiles? ¿Qué clase de información respecto del ambiente en el pasado se puede obtener a partir de ellos?
- ¿Qué características de la Antártida hacen que sea un lugar muy atractivo para el estudio de los fósiles?
- ¿Qué clase de fósiles han encontrado los científicos en este lugar?
- Generalmente los investigadores no trabajan solos, sino en equipos, a veces muy numerosos. En el caso de la búsqueda y el análisis de fósiles ¿qué disciplinas científicas están involucradas? ¿Cuál es el trabajo que hacen los científicos de cada especialidad?
Para responder las preguntas, también pueden consultar los siguientes enlaces:
Dirección Nacional del Antártico
Paleontología en el continente antártico
Dinosaurios en el Polo Sur
Tafonomía
En Antártida podría haber bacterias extremadamente antiguas
Geología
Actividad 2: paleontología, la ciencia forense de lo más antiguo
Como dijimos, el objetivo de esta actividad es familiarizarse con la forma de pensar que utilizan los científicos, en particular los geólogos y los paleontólogos. ¿Qué tipo de preguntas se hacen? ¿Cómo las responden?
Propuesta de trabajo
Imagínense que, como muchos paleontólogos, ustedes son investigadores forenses de organismos que murieron hace millones de años. A continuación les proponemos leer la nota «Hallazgo de un ejemplar completo de plesiosaurio juvenil fósil» publicada por el Instituto Antártico Argentino de la Dirección Nacional del Antártico. Luego, respondan las preguntas que se encuentran a continuación.
- ¿Qué preguntas o hipótesis formularon los científicos acerca de este animal?
- ¿Cuáles pudieron responder?
- ¿Qué evidencias encontraron para validar sus hipótesis?
- ¿Qué otras predicciones de los científicos se cumplieron luego del hallazgo de este ejemplar?
Justamente, en este capítulo de Aventura científica, Marcelo Reguero y sus colegas nos muestran el descubrimiento de este plesiosaurio.
La verificación de las hipótesis, es decir, la respuesta positiva a las preguntas que se realizan los científicos, permite hacer predicciones acerca de la naturaleza del objeto de estudio. Por ejemplo, el hallazgo de un ejemplar juvenil de esta especie llevó a los científicos a proponer que la Antártida era un área donde estos animales tenían a sus crías. También se predijo que se hallarían más ejemplares juveniles en la Antártida, y en efecto, así fue.
Actividad 3: el trabajo de campo
El objetivo de esta actividad es realizar un trabajo similar al que realizan los geólogos y paleontólogos en el campo, analizando la biodiversidad y la abundancia relativa de especies.
Te proponemos observar el siguiente fragmento de esta emisión de Aventura científica, en el que la geóloga Ana Parras nos muestra cómo realiza su trabajo junto con paleontólogos en la búsqueda y el análisis de los fósiles de la superficie del continente. Para estudiar la abundancia de una determinada especie en una gran zona de la superficie, los científicos analizan solo pequeñas regiones del área total delimitadas artificialmente por un objeto llamado cuadrata.
La cuadrata es un cuadrado de 50 x 50 cm que se coloca de manera azarosa en un sector de la región que se quiere analizar. Te recomendamos leer sobre el concepto de muestreo para obtener un conocimiento un poco más profundo de los métodos de muestreo de poblaciones. Dentro del área delimitada, se cuenta a mano el número de individuos de las diferentes especies presentes. El procedimiento se repite varias veces para asegurarse de que los números son similares en las diferentes áreas elegidas al azar.
Te proponemos realizar el siguiente trabajo, similar al de un investigador que desea analizar la biodiversidad de un determinado lugar, en este caso un jardín, un parque, una plaza o cualquier espacio que tenga pasto o vegetación.
- Construir una cuadrata de 50 x 50 cm con sorbetes de plástico.
- Colocar la cuadrata en un lugar elegido al azar y primero contar el número total de especies distintas que encuentren dentro de la cuadrata.
- Luego seleccionen tres de esas especies y cuenten el número de individuos que hay de cada una. Si no están seguros de si los ejemplares pertenecen a una misma especie o a dos distintas, se supondrá que son de la misma especie. Les recomendamos que cuenten solamente las especies que son claramente distintas. Si es posible, una buena idea es sacar fotos de los lugares donde se toman estas muestras: podrían ser útiles para responder las preguntas.
- Repitan esta operación tres veces, colocando la cuadrata en un lugar distinto cada vez y anotando el número de individuos de cada especie de vegetal.
Respondan las siguientes preguntas a partir de los datos recolectados en la tabla:
- ¿Cuántas especies diferentes de plantas encontraron dentro de la cuadrata?
- ¿Qué número de especies diferentes esperarían hallar en una zona natural como un bosque o una pradera, en comparación con el jardín de una casa?
- ¿Fue similar el número total de especies en cada uno de los sectores?
- ¿Qué conclusiones obtienen acerca de la uniformidad de especies en el terreno?
El número de especies diferentes es un buen indicador de biodiversidad. Es importante tener en cuenta que la riqueza en terrenos como jardines y parques de las ciudades suele ser escasa.
La cuadrata también es útil para calcular la abundancia relativa de una especie entre las demás. De las tres especies analizadas, ¿alguna es más abundante? ¿Qué conclusiones pueden sacar acerca de las características de la vegetación en el área a partir de los datos obtenidos?
Sugerimos que realicen un informe final en el que, por un lado, expongan los datos recolectados en la actividad y por otro, escriban las conclusiones a las que arribaron.
Como cierre de esta actividad, les sugerimos leer un extracto de los escritos que escribió Charles Darwin cuando visitó la llanura pampeana durante sus investigaciones acerca de la evolución de las especies. Este fragmento en particular describe la llanuera pampeana, a la altura de Bahía Blanca.
Extracto de los escritos de Charles Darwin en su viaje a bordo del Beagle, cuando visitó las costas argentinas
«El Beagle arribó a Bahía Blanca en 24 de agosto, y una semana después zarpó para el Plata. Con el beneplácito del capitán Fitz Roy, me quedé atrás, para viajar por tierra hasta Buenos Aires. Añadiré aquí algunas observaciones hechas durante esta visita y en una ocasión anterior, cuando el Beagle se ocupaba en la hidrografía del puerto.
La llanura, a la distancia de unas cuantas millas de la costa, pertenece a la gran formación pampeana, que se compone en parte de una roca margosa muy calcárea, y en parte de arcilla rojiza.
Más cerca de la costa hay algunos llanos formados por el desgaste de la planicie superior y por el cieno, grava y arena arrojados por el mar durante la lenta elevación del país, cuya elevación es evidente por las capas recientes de molusco que se hallan en ciertas alturas, así como por los cantos rodados de piedra pómez esparcidos por el país. En Punta Alta tenemos una sección de uno de esos pequeños llanos formados últimamente, la cual es interesantísima por el número y carácter extraordinario de los restos de gigantescos animales terrestres sepultados en ella. [...]. Aquí me limitaré a presentar indicaciones generales acerca de su naturaleza.
- Varias partes de tres cabezas y otros huesos del Megatherium, cuyas enormes dimensiones expresa su nombre mismo.
- El Megalonyx, gigantesco animal afín.
- El Scelidotherium, animal también afín, del que obtuve un esqueleto casi completo. Ha debido ser tan grande como un rinoceronte; por la estructura de la cabeza se acerca muchísimo al hormiguero del Cabo [...]; pero en otros particulares se parece a los armadillos».
Darwin, C. (1921). Capítulo V: Bahía Blanca. Diario del viaje de un naturalista alrededor del mundo: en el navío de S. M., "Beagle" (pp. 117-118). Calpe.
Ficha
Publicado: 01 de abril de 2015
Última modificación: 14 de diciembre de 2022
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Estudiantes
Área / disciplina
Biología
Ciencias Naturales
Nivel
Secundario
Categoría
Actividades
Modalidad
Todas
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Etiquetas
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Ana Parras
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