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Darío Mischener: Proyectos innovadores en el centro del aprendizaje

En esta entrevista, Mischener cuenta cómo trabajan en la orientación TIC en la Escuela Técnica ORT y comenta su experiencia diaria de llevar adelante proyectos innovadores con los alumnos.

19072006Darío Mischener es director de la Orientación TIC en la Escuela Técnica ORT Sede Belgrano. Ingresó a esa institución en el año 1995 para dictar cursos de Electricidad en 2.do año del ciclo básico, y al poco tiempo emprendió junto a la institución y a sus alumnos proyectos de diversa índole, todos ellos utilizando las nuevas tecnologías, aun cuando la Web sólo tenía unos cuantos meses en nuestro país.

Entre otras iniciativas, en 1998 impulsa el proceso de digitalización total del material didáctico de las asignaturas Tecnología I y II. También presenta y lleva adelante un proyecto extracurricular para que los alumnos de 3.er año del ciclo básico pudieran profundizar sus conocimientos de programación desarrollando proyectos interactivos para PC, proyectos que luego son publicados en el site de la ORT. En 1999 realiza la digitalización total del material de la asignatura Tecnología de los Procesos Productivos II: el material se cargó para ser consultado por los alumnos por medio de la red de computadoras del laboratorio, y además se entregó en un CD a todos los alumnos de 3.er año. Observando el entusiasmo despertado en los alumnos por las actividades desarrolladas, presenta y fundamenta un proyecto de Robótica en el año 2001.

Darío Mischener, que obtuvo el Premio Educ.ar-Intel a la Calidad Educativa, dialogó con educ.ar la semana pasada. En esta entrevista, Mischener cuenta cómo trabajan en la orientación TIC en la Escuela Técnica ORT y comenta su experiencia diaria de llevar adelante proyectos innovadores con los alumnos. De los proyectos en sí, hablan los alumnos de la ORT.

Dario Mischener

—Darío, ¿de qué se trata la orientación TIC de la Escuela Técnica ORT?

—Nosotros arrancamos hace dos años y medio, más o menos. Surgió desde la ORT la necesidad de lanzar una nueva orientación que integrara distintas tecnologías: nosotros queremos ser integradores de tecnología. Trabajamos básicamente cuatro ejes: hardware, software, comunicaciones y diseño.

Somos alrededor de 20 docentes en el equipo, entre asistentes, tutores, docentes frente a alumnos, gente que maneja redes y demás.

En 4.to año, cuando los chicos recién comienzan con la orientación, manejamos esos cuatro ejes orientados a puestos de trabajo y a redes pequeñas. Entonces, en hardware estudiamos la PC y sus periféricos, y algún desarrollo y algún dispositivo con el que se conecta la PC. En diseño vemos todo lo que es modalización de objetos en dos y tres dimensiones. En redes vemos todos los dispositivos de redes LAN, y en software vemos .Net.

En 5.º año, diseño se orienta al diseño de páginas web. En programación vemos programación de páginas web con bases de datos. En hardware nos dedicamos a microcontroladores, sistemas embebidos. Y en el área de redes vemos todo lo que es UAN: configuración, administración, equipos y demás.

En 6.º, nos orientamos a dispositivos móviles y realidad virtual. Entonces, en lo que es diseño vemos cómo realizar aplicaciones interactivas con objetos modalizados en tres dimensiones. Caso típico: desarrollo de un videojuego. En celulares vemos desarrollo de aplicaciones en Java y Flash, dependiendo de para qué tipo de aplicaciones sea. En el área de comunicaciones vemos todas las redes de comunicaciones y cómo se van interconectando y nos centramos en GSM. Y en redes, todo lo que tenga que ver con seguridad.

—¿Podría contarnos, por ejemplo, cómo están trabajando con los dispositivos móviles?

—El tema es que la tecnología celular es bastante nueva y honestamente a veces sentimos que corremos atrás de la zanahoria. En este momento estamos en un plan de capacitación de los docentes y a su vez estamos comprando tecnología para poder dictar las clases. Y en este recorrido es donde se nos suman a su vez otros proyectos. Porque nosotros vamos a un proveedor a comprar este tipo de tecnología, nos pregunta para qué la vamos a usar y cuando le contamos nos dice “me interesaría, aparte de realizar la venta, que si alguien desarrolla tal aplicación pudiera venir a trabajar a la empresa”. De esta manera también conseguimos proyectos para los alumnos, vinculándolos con los proveedores.

En este momento tenemos un proyecto interno para estudiar los alcances y limitaciones que nosotros tenemos como equipo docente. El proyecto prevé que los alumnos puedan acceder por celular a exámenes, calificaciones, fechas, y está en etapa de desarrollo.

—¿Cómo organizan la enseñanza y elaboración de proyectos como los que menciona?

—Todos esos contenidos los desarrollamos en forma de seminarios. Y tanto en 4.º como en 5.º y 6.º años desarrollamos proyectos, en general anuales: los alumnos tiran una idea para hacer un desarrollo, se forman grupos alrededor de esta idea y cada alumno aporta desde su área de interés. Por ejemplo, hacen un robot. El interesado en hardware hace el hard; el que tiene interés en el software desarrolla el soft; y el que se interesa por la modelización arma el modelo 3-D de ese robot. Lo mismo con los videojuegos, que tienen mucho de diseño y mucho de programación.

Los grupos son de dos a cuatro alumnos, y cada grupo impulsa su proyecto acompañado por un docente tutor o por una pareja formada por docentes que tutorean el proyecto.

—Entonces trabajan con alumnos que corresponden a distintos cursos...

—Sí. Estos cuatro ejes los desarrollamos en dos categorías: las llamamos seminarios básicos y seminarios avanzados. Es decir que todos los alumnos logran un mínimo de comprensión de la tecnología que estamos abordando y, después, eligen qué profundizar. Van a ser expertos en ese tema que profundizan; respecto de los demás, van a conocer los alcances y limitaciones de esas tecnologías.

Los alumnos tienen mayor carga horaria en los temas que deciden profundizar: ven con mayor profundidad contenidos que eran básicos o nuevos contenidos, y sobre esa base aportan al proyecto.

—¿Cómo comienzan los alumnos a pensar los proyectos?

—Tenemos alumnos que ya vienen con ganas de desarrollar algo y desde años anteriores saben de la dinámica de trabajo y van pensando qué quieren hacer. Y tenemos chicos que no. El problema es aquellos a los que no se les ocurre nada sienten cierta frustración porque piensan “si no se me ocurre nada esto no debe ser para mí, me voy a cursar otra orientación de las que ofrece la escuela”, y eso hay que manejarlo con cuidado.

En principio es una etapa que dura aproximadamente dos meses: torbellino de ideas donde todos los alumnos dicen que lo que quieren hacer sin ninguna limitación: ni de costos, ni de recursos, ni de conocimientos. Simplemente: llenemos un pizarrón de ideas.

Entonces ellos imaginan el producto final que siempre es un cohete intergaláctico teledirigido, radiocontrolado… A esos alumnos los bajamos a la realidad y les decimos que el proyecto tiene que ser desarrollado con los contenidos que van a ver en el ciclo lectivo, que el proyecto tiene que poder ser financiado, que los recursos para desarrollarlo –si van a necesitar algo de software o de hardware– tiene que tenerlos la escuela, y otras cuestiones que acotan los proyectos.

También tenemos alumnos que, o bien porque quieren zafar o bien porque no se les ocurre otra cosa, quieren simplemente prender una lamparita. La ventaja impresionante con la que contamos es que son adolescentes, y si bien esto trae algunos problemas también trae beneficios, que es que son chicos que cuestionan absolutamente todo.

En cuanto se da la posibilidad les decimos: “Eso que vos cuestionas ¿querés cambiarlo? Te vamos a ayudar a hacerlo”, y con la creatividad que tienen los chicos eso es un motor…

Los proyectos tienen que estar funcionando para la aprobación anual de la materia. Si no están funcionando no aprueban, a menos que nosotros como equipo docente nos hayamos equivocado en la evaluación del proyecto y surjan complejidades que no teníamos previstas y que ese proyecto por culpa del equipo docente no se pueda llevar a la práctica. Pero si al alumno le sirvió y aprendió con él y lo puede demostrar con un objeto aunque no esté acabado ni terminado, todo lo demás se toma en cuenta.

Como ejemplo tenemos un grupo de chicos que estaban cansados de llevar al club y no encontrar nunca el carnet, tener que bajar el bolso, buscarlo, pelearse con la gente de la entrada para que los dejen pasar porque son socios… Y decidieron hacer un sistema de acceso con huellas dactilares. Armaron la base de datos, como para poder ir al club y poner el dedo y pasar sin pelearse con nadie.

—¿Cómo analizaría la experiencia de los alumnos de trabajar en conjunto en proyectos que ellos mismos diseñan?

—El tema es complejo, porque en general los chicos están acostumbrados a ser pasivos. O sea: uno les explica durante una determinada cantidad de clases, deja pasar una clase y toma una evaluación: el chico estudia en la casa para la evaluación y listo.

Acá son sujetos activos. Desde el principio les preguntamos qué quieren cursar, cada docente plantea cuáles son los contenidos y cómo los va a abordar, y eso ya es un primer desafío. De todas maneras, como los contenidos básicos los ven todos, lo que cambia es el momento en que los van a abordar.

Eso no genera demasiados problemas, pero lo que sí aprovechamos es el compromiso del alumno: como está estudiando lo que él decidió estudiar, asume otro compromiso. Y sumado a eso sabe que al alumno que tiene al lado, al compañero, también le interesó lo mismo que a él. Entonces se forma un ambiente bastante bueno como para desarrollar los temas.

Algunos chicos quieren hacer desarrollo de páginas web, y obviamente páginas web se pueden hacer sobre cualquier temática. De un grupo de alumnos surgió la idea de hacer el sitio de la orientación, y llenarlo de contenidos que les sirva a los demás alumnos; no sólo contenidos curriculares de la materia o vinculados a la escuela, sino contenidos propios. Que fuera un canal de comunicación para que cuando los chicos egresen sigan conectados a través de un foro o algún canal o herramienta que exista en ese momento, y ellos lo ven como un aporte a ellos mismos y al resto de sus compañeros.

Otro grupo de alumnos va a hacer el desarrollo del sitio del Museo del Holocausto. No sólo van a hacer la implementación tecnológica del sitio, sino que van a ahondar en los contenidos, con lo cual ahora estamos yendo a visitar el Museo del Holocausto para ver cuáles son las necesidades para el desarrollo material del sitio.

Así que se generan lazos entre los chicos y con la comunidad.

—Como laboratorios productivos formados por alumnos vinculados a la comunidad...

—Claro. Me había olvidado de mencionar esto: en 6.º año estamos trabajando en un proyecto que busca que los chicos salgan de acá a un sistema de incubadoras de empresas. La semana próxima vamos a ir al Centro Metropolitano de Diseño (CMD) a ver de qué se trata todo el tema de las empresas incubadas, qué requerimientos tienen para la presentación de proyectos y demás. Y los alumnos cursan una materia en la que estudian la cuestión de las carpetas de proyectos; nuestra ambición es que un grupo de alumnos que se haya llevado bien, que haya podido trabajar en conjunto, que haya tenido ideas que son comercialmente aptas, pueda presentar sus proyectos y que sean incubados, y que en el futuro sean empresas de alumnos egresados de ORT.

Agradecemos a los alumnos de Darío, por el tiempo dedicado a hablar sobre sus proyectos. Son: Andrés Golwaser, Ignacio Orellana, Rocío Zalaya, Leonardo Andermann, Yamila Fraiman, Ianiv Lutzker, Nicolás Aguinsky, Alexis Medvedeff, Yago Alonso, Daniel Kaufman, Luciano Stupenengo, Alex Druchas, Melina Kaler, Tamara Halac, Ariadna Krugliansky, Daniela Milier y Santiago De Lara, y pueden escucharse sus voces en el audio.


Fecha: Mayo de 2006

Ficha

Publicado: 19 de julio de 2006

Última modificación: 18 de diciembre de 2012

Audiencia

Área / disciplina

Nivel

Secundario

Categoría

Entrevistas, ponencia y exposición

Modalidad

Todas

Formato

Texto

Etiquetas

proyecto innovador

digitalización

Autor/es

Pablo Mancini

Licencia

Creative Commons: Atribución – No Comercial – Compartir Igual (by-nc-sa)


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