No es necesario deslumbrarse al
mirar la
superficie reflectora. La sombra del objeto situado en el foco
debe quedar justo en el
orificio del fondo. Si observas la sombra del plato en el piso, el
orificio se ve como si estuviera tapado.
Fuera de foco
Justo en el foco
El agua tarda en hervir en el
vaso.
Si en vez de vaso usas una pequeña
lata,
como las de leche condensada, pintada de negro mate, puedes hacer que un
poco de
agua, como una cucharada, hierva después de dos minutos de estar en el
foco del
plato.
Aquí puedes ver la ebullición del agua en el fondo
de la
lata.
La lata se ha fijado con alambres de clip y cinta
adhesiva.
Un malvavisco en el foco no
llega a
tostarse pero sí se calienta.
El malvavisco se
calienta
hasta hacerse como melcocha y ¡sabe diferente!
Un termómetro situado en el
foco llegó
a medir una temperatura mayor a 180 grados Celsius.
¿Qué puedes hacer en ese sitio
caliente?
Y la luz
también
viaja en sentido contrario
Si sitúas una lámpara pequeña
en el
foco del reflector, la luz sigue el camino inverso a la del Sol.
El reflector puede usarse como
un faro
para dirigir un haz de luz a lo lejos.
Cada gajo refleja
la luz y
si observas de lejos verás una línea luminosa en cada gajo.
¿Por qué solamente una línea y no se ve
iluminada toda
el área del gajo?