¿Qué significa Apartheid?

En 1948, el Partido Nacional (NP, en inglés) llegó al poder en Sudáfrica. Éste introdujo el apartheid, que determinaba dónde la gente podía vivir, aprender, trabajar, dónde y con quién podía socializar y contraer matrimonio. Estas leyes fueron impuestas a la población y muchos las resistieron. Miles tuvieron que huir del país cuando el Estado del apartheid se propuso aplastar a la oposición. La resistencia de la década de 1960 llegó a su pico en 1976 y continuó durante la década de 1980, cuando el gobierno se vio obligado a declarar el estado de emergencia. La lucha amenazó con transformarse en una guerra civil. Finalmente, el gobierno tuvo que ceder ante la oposición interna e internacional contra el apartheid. A principios de los años 90, hubo conversaciones entre el gobierno y los líderes de la resistencia para forjar el camino a la paz y la estabilidad. En 1994, Sudáfrica llevó adelante sus primeras elecciones democráticas, que abrieron paso a una nueva era de reconstrucción y reconciliación, al tiempo que mostraron al mundo un ejemplo de acuerdo pacífico y negociado.
¿Qué fue el apartheid?
La traducción de apartheid (vocablo afrikaan) es separación. Este término se usa para describir la política racista legalizada del NP entre 1948 y (oficialmente) 1994. Sus raíces pueden encontrarse en las más tempranas políticas de segregación en Sudáfrica. El apartheid fue más lejos que la segregación al regular formalmente la clasificación, las relaciones y las divisiones raciales. Concebía a la población negra como atrasada e incivilizada, que necesitaba ser apartada de la población blanca. La única relación que los africanos tenían permitido entablar con los blancos era aquella en la cual los servían. Se discriminaba a la población negra en casi todas las esferas de la vida. Las leyes racistas dictaminaban dónde y cómo podían vivir, viajar, trabajar, ir al colegio, casarse y socializar. La filosofía básica del apartheid era simple. Aunque Sudáfrica era un Estado unitario, los nacionalistas argumentaban que su población no constituía una sola nación, sino que estaba compuesta por cuatro grupos raciales: los blancos, los negros, los coloured (mestizos) y los indios. Estas razas, a su vez, fueron divididas en 12 «naciones». La población blanca comprendía al grupo de los angloparlantes y al de los hablantes del afrikaan. La población negra estaba dividida en 10 grupos étnicos. Esto convertía a la raza blanca en el grupo mayoritario del país. Asimismo, el NP justificaba el racismo como necesario, y para eso se apoyaba en la evidencia de conflictos entre distintas razas y culturas por todo el mundo. Se justificaba la discriminación haciendo uso de la teología cristiana y de las teorías racistas de la superioridad blanca y la inferioridad negra.
¿Cómo afectó las vidas de las personas?
La legislación del apartheid estaba dividida en dos grupos principales, llamados pequeño apartheid (petty apartheid) y gran apartheid (grand apartheid). El primer aspecto de las leyes del pequeño apartheid apuntaba a regular la vida cotidiana de forma racista con el objeto de crear un estilo de vida dividido en términos raciales y desiguales para los sudafricanos. Un ejemplo de «pequeña ley del apartheid» es la Ley de Prohibición de los Matrimonios Mixtos de 1949, que convirtió en ilegal el casamiento entre la gente blanca y la perteneciente a cualquiera de las otras razas. La enmienda de la Ley de Inmoralidad n.° 21 de 1950 iba incluso más allá al prohibir las relaciones sexuales entre una persona blanca y una negra, india o coloured. El gran apartheid separaba a las razas a gran escala, forzándolas a vivir en diferentes lugares de acuerdo con su raza. Esto requería una clasificación racial y se logró a través de la Ley de Registro de la Población N° 30 de 1950. De acuerdo con esta ley, todos los sudafricanos debían ser clasificados como blancos, negros, coloured o indios, y esta raza debía ser registrada en sus pases de identificación. Se establecieron equipos o juntas oficiales para decidir el destino de aquellos cuya raza no podía ser determinada. Esto causó una gran desazón, especialmente entre la población coloured, cuyos rasgos mestizos de carácter único a veces llevaron a la ruptura de familias, a cuyos miembros se les asignó una identidad racial distinta. El segundo elemento del gran apartheid fue la Ley de Áreas de Grupo n. ° 21 de 1950. Hasta entonces, las diferentes razas coexistían en la mayoría de las ciudades. Esta ley puso fin a las áreas residenciales mixtas. Definió dónde la población tenía que vivir y trabajar en tanto que a cada raza se le asignó su propia área. La gente no tuvo otra opción que la de mudarse. Además, esta ley sentó las bases para los desplazamientos forzosos que se realizarían en años subsiguientes.