Un recorrido interactivo con preguntas y ejercicios de escritura sobre una novela de Pablo De Santis.
En forma navegable e interactiva, cada actividad propone información sobre la novela, fragmentos de la misma, preguntas y actividades para escribir en pantalla.
Cuando se trabaja una novela en el aula, es casi inevitable partir del argumento de esa novela. La dificultad que supone para los alumnos elaborar un resumen, así como las habilidades de comprensión y de escritura que el mismo resumen pone en funcionamiento, lo convierten en una actividad productiva.
En el caso de la novela Lucas Lenz y la mano del emperador la propuesta es partir de un resumen mínimo que se da a los alumnos. La historia que se relata en la novela supone cierto grado de complejidad y muchas de las actividades aquí planteadas se proponen como un modo de "desmontar" una trama compleja desde distintos puntos de vista.
Una vez que los alumnos leen ese resumen, se les puede proponer que lo amplíen en etapas sucesivas. Esta actividad sería útil para trabajar con ellos la expansión de un texto que puede darse tanto por el agregado de nuevas frases dentro del texto inicial o bien por la ampliación de frases ya dadas. Desde el punto de vista de la comprensión de la novela, se les puede proponer que agreguen tres acontecimientos más, por ejemplo, que consideren principales con relación a la historia; analizar qué personajes van apareciendo en torno a esos acontecimientos, etc.
Por otro lado, la guía de preguntas que se ofrece tiene como objetivo delimitar una serie de pequeñas historias, incluidas en la novela, que varían en su extensión. Se intenta analizar aquí el modo de construcción del relato: cómo se organiza la trama narrativa.
Es probable que los alumnos estén más acostumbrados a la lectura de novelas de tramas más sencillas, historias lineales que van tejiendo una serie de acontecimientos que se conectan entre sí y el lector va "pasando" de un hecho a otro sin dificultades. En este caso, las historias intercaladas "desvían" por momentos al lector de la historia central, a la que debe regresar en un capítulo posterior. En este sentido, las dos actividades propuestas (expansión de un resumen inicial y reconocimiento de historias intercaladas) pueden ser útiles para trabajar una trama compleja.
Sería interesante aquí la lectura de otros textos narrativos que ofrecen una trama en la que se van intercalando una serie de pequeñas historias. Un ejemplo, sin duda atractivo y quizás más sencillo en su construcción, es Las mil y una noches. En este caso hay una historia básica que vincula al personaje de Sherezada con el rey que la ha amenazado de muerte si no logra contarle una nueva historia cada noche. Sobre esa trama básica se van insertando entonces los relatos de la misma Sherezada, con un grado de independencia tal -podríamos decir- que posibilitó que muchos circularan como cuentos autónomos (por ejemplo, la historia de "Simbad, el Marino").
La propuesta en estas actividades es trabajar en torno al concepto de personaje. El primero que se presenta es el guardián del museo que es, a su vez, el narrador de la historia. ¿Qué función cumple este personaje? ¿Cómo se presenta a sí mismo?
Tomando como eje el personaje buscador, es posible establecer una comparación con la figura del enviado, por un lado, y con la del detective, por otro. Este puede ser el punto de partida para la elaboración de descripciones de esos personajes.
La figura del detective (mencionada en Lucas Lenz y el Museo del Universo cuando se trata de definir qué es un buscador) puede ser interesante para ingresar en la lectura de relatos policiales. En este caso, se han sugerido cuentos que corresponden al denominado "policial de enigma".
A partir de la lectura de algunos cuentos del género, se pueden comparar los investigadores mencionados (Auguste Dupin, Sherlock Holmes y el Padre Brown) para determinar un perfil de detective: cuáles son los rasgos que comparten, el modo en que "actúan" en la búsqueda de pistas, las actividades que suelen desarrollar, la manera en que resuelven los casos y el modo en que exponen, al final de los cuentos, esa resolución.
Mencionábamos en la actividad anterior el relato policial conocido como de enigma. Se trata de un género particular dentro del género policial, que se construye a partir del entramado de dos historias: la historia de la investigación y la historia del crimen.
Cuando el cuento se inicia, el crimen es un hecho que ya ha ocurrido; la historia de ese crimen es un enigma que
habrá que develar. Generalmente, las pistas están "dichas", están mostradas, y el
investigador debe poder leerlas. La historia de la investigación es, justamente, el relato del proceso de
develamiento que hace el detective. Cuando esta investigación termina, el mismo detective suele reunir al
resto de los personajes y exponer la historia del crimen, una historia que, como decíamos antes, ya ha
sucedido, pero se reconstruye en esa escena.
El reconocimiento de esas dos historias es otro modo de "desmontar" la historia global con vistas a
analizar el mecanismo de su construcción. En Lucas Lenz y la mano del emperador, hay una
historia de la búsqueda de la mano (no ya del crimen de Saus, puesto que a Lenz no se le pide
que lo resuelva) y una historia de la mano del emperador (desde su fabricación hasta "su
último elegido").
Sería interesante, entonces, reconocer esas dos historias y compararlas, si se quiere, con el modo de funcionamiento en los policiales de enigma.
De todas las historias incluidas en esta novela, las que narran los argumentos de la novela Los cinco enviados del emperador son, sin duda, las más interesantes.
Presentadas como argumentos de novelas, son textos que consiguen cierta autonomía que permite trabajarlas tanto en relación con el relato que las incluye como en forma aislada. Desde el punto de vista de su inclusión en la novela, se constituyen en materia fundamental para develar el enigma que Lenz debe resolver: sirven para explicar la historia de la famosa mano y presentan datos útiles para su búsqueda.
Aisladamente, pueden ser útiles para trabajar la lectura de resúmenes: qué características presentan como tales, en qué persona gramatical se narran, en qué tiempo verbal. En este sentido, proponerles a los alumnos la escritura de unas páginas de esas novelas supone considerar esos mismos temas desde el punto de vista de la narración ficcional. Habría que discutir, entonces, y decidir quién narraría esa historia, en qué persona lo haría, en qué tiempo verbal, qué efectos tendría el relato si se eligiera el tiempo presente, etc.
Al final de la novela, es probable que, como lectores, pensemos en la relación entre Los cinco enviados del emperador y esta novela de un modo diferente. En cierto sentido, esas cinco novelas constituyen lo que se denomina un relato en "abismo": un relato que, si bien está incluido en la novela, la explica y la representa en su totalidad. Eso parece decirnos el hecho de que Lenz se convierta en un nuevo enviado. ¿Acaso Bujer lo estaba buscando a él desde el inicio para elegirlo? Mientras él buscaba la mano del emperador, ¿en realidad lo estaban buscando a él?
En ocasiones, cuando leemos una novela, hay numerosos fragmentos ya leídos que se resignifican, que adquieren nuevos sentidos, a medida que avanzamos. Tal es el caso del fragmento elegido para analizar. De alguna manera, el hecho de que Lenz se convertiría en un enviado estaba dicho; pero probablemente no lo habíamos "visto" en una primera lectura. Muchas veces, aprender a leer, en este sentido, es aprender a "leer" como los detectives.
Por último, una serie de novelas que giran en torno a un mismo protagonista cuyo nombre siempre se repite en los títulos de cada libro recuerda a la hoy famosa serie de Harry Potter . En este caso, sería interesante trabajar cómo se va construyendo una saga alrededor de un personaje central que, entonces, se convierte en "héroe" de esa serie.
La lectura compartida con los compañeros, el docente y otros adultos (de manera habitual y sistemática) de cuentos, fábulas, leyendas y otros textos narrativos literarios; poesías, coplas, adivinanzas, y otros géneros poéticos; y de textos no literarios como descubrimientos, historias de vida, notas de enciclopedia sobre diferentes contenidos que se están estudiando o sobre temas de interés para los niños, entre otros.