Actividad que te permitirá llevar adelante un trabajo a partir de esta
técnica.

El esténcil o plantilla es una excelente herramienta para producir imágenes. Es fácil de
utilizar, y se puede aplicar sobre distintas superficies. Su origen como arte y técnica de impresión se
remonta a fechas prehistóricas (entre 10.000 y 25.000 años atrás).
Antiguas civilizaciones de Egipto, Grecia, y China utilizaron este sistema de impresión principalmente
aplicada a construcciones, y las pinturas rupestres de la Cueva de las manos, en la Patagonia argentina, son
también una muestra de esta técnica.
Más acá en el tiempo, luego de registros aislados de las décadas de 1980 y 1990, en el
año 2000 el esténcil toma en nuestro país una identidad propia como reacción a la
situación política y social del país. El arte toma las calles e interfiere en el espacio
público.
Hoy encontramos este tipo de impresiones también en la industria, o en las reglas con letras y formas
caladas que se utilizan en arquitectura.
El proceso de impresión de esta técnica consiste en regular el paso de tinta sobre la superficie
donde es aplicada, limitando la impresión solo a determinadas áreas. Puede funcionar soplando tinta
sobre una mano apoyada en la pared (como en las primeras impresiones rupestres) o utilizando un aerosol sobre una
vieja radiografía con un diseño recortado (como se hace actualmente en las calles de las grandes
ciudades).
Te proponemos a continuación una propuesta para que puedas llevar adelante un trabajo a partir de esta
técnica.
Actividad 1: La técnica del estarcido
Pasos:
- Tomar una hoja de árbol.
- Dibujar su contorno en una placa radiográfica y recortarla. Obtendremos así un positivo (la hoja
1) y un negativo (la plantilla calada 2)
- Tomar témpera de un color y colocarla en una bandejita de telgopor (del tipo de las que se utilizan en
los supermercados). Extenderla con un rodillo de gomaespuma en la superficie de la bandeja. Repetir esta
operación con otro color.
- Colocar la hoja 1 y apoyarla en la superficie a imprimir (puede ser una hoja de papel, cartulina de color o
tela) y extender sobre ella la témpera con el rodillo (también puede utilizarse una esponja de
gomaespuma o natural, para que el resultado sea más sutil). Retirar la plantilla 1. Lo que obtendremos es
una superficie de color donde la silueta 1 está “recortada” visualmente, es decir una imagen en
negativo.
- Realizar la misma experiencia utilizando el negativo (plantilla 2) y extendiendo en el hueco témpera de
ese color o de otro. Al retirar la plantilla 2 obtendremos una imagen en positivo.
- Combinar estas dos formas de colocar la pintura de modo libre, componiendo una obra
Actividad 2: Imagen personal
Por otra parte, sugerimos la elaboración de una imagen personal que se pueda plasmar con esta
técnica.
Para esto es conveniente que la imagen a calar sea sencilla y plana. Puede utilizarse una fotografía en
blanco y negro o una fotocopia, lo importante es que esté bien contrastada. Puede incluirse también
texto que acompañe la imagen o la componga.
Luego se repite el procedimiento que realizamos de forma sencilla con la hoja de árbol, siguiendo estos
pasos:
- Tomar una placa radiográfica, acetato o cartón, marcadores y un cutter.
- Dibujar en la plantilla el diseño.
- Calar la imagen teniendo mucho cuidado en hacerlo de modo que siempre queden las partes interiores
“sujetadas” al marco de acetato por segmentos de radiografías. Por ejemplo, si quisiera calar la
letra A es necesario que el triángulo interior quede ligado al marco, para esto dejaré
pequeños “puentes” de radiografía sin calar.
- Podemos imprimir una prueba con témpera sobre papel o directamente ensayar impresiones con aerosol sobre
distintas superficies. Puede ser sobre papeles con témpera, aplicándola con rodillo de gomaespuma, o
aprovechar para experimentar sobre distintas superficies como telas, papeles de colores o bolsas de
plástico, rociando la placa desde unos diez centímetros con aerosol.
Materiales de trabajo recomendados:
- Papel A4 para bocetar
- Lápices, sacapuntas, gomas
- Tinta china negra
- Marcadores negros y de color de distintos grosores
- Trincheta o cutter
- Placas radiograficas “lavadas” con lavandina, o placas de acetato o cartón
- Aerosol
- Témpera, esponja de gomaespuma o rodillo y bandejita
Autoras: Violeta Cincioni y Florencia Fernández Frank