10 Puntos importantes para la prevención

Mejore la calidad de las paredes, techos y pisos de las viviendas. Estos deben ser de material que no se agriete, con superficies lisas que no permitan formar hendijas y huecos donde puedan refugiarse los insectos. Para ello deben emplearse cal y arena en los revoques e inclusive se puede utilizar una opción más económica que es el barro bien amasado. Mantenga la vivienda higienizada, sus muebles, cuadros y enseres. Es necesaria su remoción periódica y ventilación, asoleado de las prendas de vestir, reparación de roturas, y blanqueado de paredes y techos. Lo mismo en los depósitos, donde es corriente la permanencia duradera de objetos que no se cambian de lugar y mucho menos se limpian. Estas medidas se basan en las frecuentes migraciones de vinchucas transportadas en estos objetos cuando los pobladores de zonas endémicas viajan o se mudan. Debe asegurarse también la eliminación de rendijas y rincones que posibiliten el refugio de las vinchucas. Estas escapan a la luz, por lo cual eligen los huecos y sitios más oscuros. Por eso, la limpieza debe también desarrollarse en depósitos, baúles, muebles, gallineros y en cualquier otro lugar que pueda resultar propicio al insecto. Utilizar insecticidas modernos que permitan matar la vinchuca. Es importante que penetre en todos los rincones de las viviendas, lo que se logra si no hay objetos que se interpongan entre el insecto y las paredes. Es necesario que los moradores de las viviendas colaboren en la tarea, permitiendo la exclusión de estos objetos. Facilite la tarea de los rociadores, colaborando con ellos en todo cuanto sea necesario. Conozca la vinchuca, aprenda a identificarla y diferenciarla de otros insectos. Para ello existe una forma muy práctica que se basa en sus características. Se trata de ubicar el bicho entre dos papeles blancos, apretarlo bien y ver que es lo que sale de sus intestinos: si es sangre o marrón oscuro es una vinchuca; en cambio, si es un líquido de color verde, amarillento purulento, es un insecto herbívoro o fitófago. En el caso de una pulga o mosquito, que también son hematófagos como la vinchuca, esta se diferencia por sus patitas con terminación en amarillo. Si ha sido picado por vinchucas, consulte de inmediato al médico. Tenga en cuenta que al principio, la enfermedad es asintomática, por lo que las complicaciones cardíacas y de otros órganos aparecerán recién al cabo de unos años. Un buen control médico a tiempo puede evitar la aparición de estas complicaciones. Si el médico le diagnostica la enfermedad, siga fielmente todas sus indicaciones. Los controles son fundamentales. Ante cualquier duda consultar al médico y hacerlo cuantas veces lo crea conveniente. Él podrá mejor que nadie, asesorarlo sobre este tema y controlar su estado de salud. Denuncie a la autoridad sanitaria correspondiente la existencia de vinchucas. Identifique a la vinchuca por la zona donde se encuentre. Esto es muy importante a la hora de la difusión y prevención ya que no todas las poblaciones la conocen como vinchuca, por ejemplo, algunos la llaman chinche verde, negra, chupadora, gaucha, etc. Llamarlas como se las conoce en los lugares de residencia, permitirá una mejor detección y comunicación.

http://www.alcha.org.ar/enfermedad/prevencion.htm