Juegos cooperativos

Ilustración: Gustavo Damiani

¿Por qué esta propuesta?

Asumiendo que uno de los fines de la educación es la socialización y que la presente es una época en la que, por distintas razones, hombres y mujeres están cada vez más aislados -solitarios, con acciones y trabajos sumamente individualistas y estimulados a ser 'el mejor' aun en detrimento de...-, el poder sostener y reforzar la cadena de comunicación entre pares nos parece uno de los puntos primordiales de la tarea educativa.

Claro que ello requiere, ante todo y más allá de enunciados, que cada docente lo tenga bien claro y busque los caminos más propicios para determinado grupo, clase, situación, incluso en los juegos.

Supuestamente, cada situación de juego grupal supone un funcionamiento cooperativo, pero no es así. Porque para que sea verdaderamente cooperativo tendrán que estar presentes los acuerdos internos, la asunción de distintos roles personales, la distribución coordinada de tareas, el aprovechamiento grupal de lo que mejor sabe hacer y puede cada uno de los integrantes del grupo; la acción conjunta; la reflexión sobre lo actuado para tratar de hacerlo mejor.

¿Quién no comprende la importancia del poder comunicarse con otro/s, a la sazón compañeros de tareas, de equipo, para tratar de resolver juntos un problema, una tarea, una estrategia?

El trabajo cooperativo requiere, en principio, que cada uno pueda pedir y ofrecer ayuda, aceptar complementar y complementarse con otro/s, pasar del yo al nosotros para empezar a tejer, propiciar y/o fortalecer una actitud solidaria, altruista, fraternal.

Actividades sugeridas

Aspectos a tener en cuenta

Aportes sobre el tema

Velázquez Callado, C. y otros. Ejercicios de Educación Física para Educación Primaria. Fichero de juegos no competitivos. Escuela Española, Madrid, 1995.

Ministerio de Educación
Programa Nacional de Innovaciones Educativas