Introducción

Lectura

Qué es la literatura es una pregunta que atraviesa buena parte de la producción teórica y crítica de las últimas décadas, como así también el campo de la producción literaria. Tal es el caso de ciertos textos de ficción en los que es posible encontrar reflexiones sobre la literatura, como la novela Respiración artificial de Ricardo Piglia. Los reportajes a escritores también suelen ser una fuente metatextual interesante para observar diferentes posiciones frente a la pregunta por el concepto de literatura.

La teoría literaria moderna, desde el formalismo ruso en adelante, ha conceptualizado esta pregunta como el problema de la especificidad literaria y ha dado diferentes respuestas que se podrían esquematizar de la siguiente manera: por un lado, se encuentran aquellas definiciones que buscan en la literatura algo esencial, un valor intrínseco, que perdura en el tiempo y que permite afirmar, por ejemplo, que determinado texto es una "bella obra literaria" o que es un clásico; otro tipo de definiciones caracterizarían a la literatura a partir de algunas "marcas" formales (estructurales, léxicas, temáticas, etc.) que darían cuenta de su especificidad.

Esta discusión puede enriquecerse a partir de la introducción de otras perspectivas. Desde una mirada sociológica, interesa rescatar la noción de "institución literaria", en la que se incluyen distintas instituciones y actores que cumplen una función (fundamental) y que detentan un poder específico en el momento de definir qué es la literatura. La universidad, los editores, la crítica literaria académica y periodística, los suplementos culturales de los diarios y las revistas literarias son instituciones especializadas que cumplen una función central en las decisiones sobre qué es y qué no es literatura: incluyen y excluyen textos, realizan una tarea, en muchos casos, explícita o implícitamente valorativa y proponen también un modo de interpretar los textos. Tomando el caso específico de la crítica literaria periodística, es este tipo de crítica la que suele ofrecer una orientación más directa a los lectores e influir en la consagración de los escritores.

Ampliando estas consideraciones y en relación con el ámbito de la escuela, es importante considerar que nuestros alumnos tienen ideas, representaciones y concepciones previas acerca de qué es la literatura, originadas en sus experiencias culturales dentro y fuera de la escuela. Seguramente estas influirán en el momento de enfrentarse con un texto literario durante una situación de lectura. La presencia de estas representaciones previas y la posibilidad de su discusión incidirán sobre las prácticas de lectura en el aula. En general, este tipo de discusión no ha sido desarrollado en las clases de literatura y su introducción mostraría aspectos interesantes respecto de los saberes y experiencias previos de los alumnos y propondría una motivación para iniciarse en la práctica de la lectura.

Sugerencias

Una discusión sobre las representaciones de la literatura que tienen los alumnos puede convertirse en una interesante motivación para abordar la lectura de los textos. En esta línea, se les puede ofrecer un conjunto de textos literarios que realicen un trabajo diferenciado con la lengua. Se podrían incluir, entre otros, un soneto del Siglo de Oro, un capítulo de Moby Dick donde se utilice vocabulario científico, un capítulo de alguna novela de Manuel Puig que trabaje la lengua oral, un poema de Nicanor Parra que trabaje con préstamos de los discursos político, publicitario y cotidiano, una poesía concreta. A partir de este corpus, los alumnos reconocerán -cuando corresponda- cuáles son los discursos sociales presentes en la producción de esos textos y discutirán acerca de las "marcas" a partir de las cuales ellos creen que esos textos pueden ser reconocidos como literarios.

Otro corpus posible para discutir concepciones de la literatura son las definiciones de teóricos, críticos y escritores. Ofrecemos algunos ejemplos que podrán enriquecerse con otros:

  1. Se comprende bajo el nombre de "literatura" la reunión de obras en prosa y verso. Esta palabra significaba primitivamente el alfabeto y el arte de dibujar las letras. Se aplicó también a la gramática propiamente dicha y después a los conocimientos literarios en general. Finalmente, y por excelencia, a las obras literarias de las que debe honrarse una nación.
  2. Obra literaria es una ordenada serie de pensamientos, expresados por medio del lenguaje, y dirigida a un fin, que en último resultado nunca debe ser otro que el bien de la especie humana.
  3. La literatura se define esencialmente en términos de lo que alguna clase social y algunas instituciones (las escuelas, las universidades, los libros de texto, los críticos, etc.) llamen y decidan usar como literatura.
  4. Literatura es todo lo que se lee como tal.

En cuanto a las entrevistas realizadas a escritores, son recomendables las que se encuentran en el Tomo 6 del Capítulo Historia de la literatura argentina, del Centro Editor de América Latina.

En el mismo sentido, sería interesante que los alumnos entrevisten a escritores de la zona, a partir de la producción de un cuestionario que oriente la entrevista hacia la discusión sobre el concepto de literatura.

Otra propuesta posible consistiría en el armado de un corpus de reseñas críticas de distintos medios gráficos referidas a un mismo libro, para comparar las valoraciones que se realizan sobre el texto reseñado y en base a qué concepto de literatura lo hacen.

Sugerencias didácticas

"Clásico no es un libro (lo repito) que necesariamente posee tales o cuales méritos;
es un libro que las generaciones de los hombres urgidas por diversas razones,
leen con precioso fervor y con una misteriosa lealtad."

Jorge L. Borges, "Sobre los clásicos"1.

En la problematización acerca de qué se considera que es o no es literatura se encuentra la clave de toda reflexión dentro del aula sobre la obra literaria: preguntarse por qué es literatura es ya una forma compleja de hablar sobre la literatura. Porque la misma pregunta dispara formas del decir sobre la literatura. Así, por la negativa o la positiva esta pregunta puede atravesar los tres años del Polimodal, organizar el dictado de la materia, abrir a la selección de las obras con las que se trabajará, etc.

Hacia allí se dirige, entonces, esta propuesta. Desde la concepción de los románticos sobre la literatura como "las bellas letras", pasando por las excepción o el desvío a la norma que sugieren los formalistas rusos, hasta la visión del estructuralismo que la percibe como un decálogo de funciones; todas son discusiones que, en definitiva, denuncian que no hay una sola definición de qué es la literatura. Como afirma el crítico inglés Terry Eagleton: "Cualquier cosa puede ser literatura, y cualquier cosa que inalterable e incuestionablemente se considera literatura -Shakespeare, pongamos por caso- puede dejar de ser literatura"2. Delimitadas por los gustos de cada época, los avatares del mercado, las disputas del campo intelectual y literario; la respuesta a la pregunta por qué es literatura fluctúa y produce una incertidumbre enriquecedora en la discusión de la clase.

En ese sentido, se sugiere la lectura de textos de autores que pueden acompañar al docente en estas discusiones: Jakobson, Foucault, Shklovski, Barthes, Eichenbaum, Eagleton, son grandes nombres que ayudarán a armar grandes discusiones.

1Borges, Jorge Luis. Otras inquisiciones, Buenos Aires, Emecé, 1952.

2Eagleton, Terry, "Introducción", en Una introducción a la teoría literaria, México, FCE, 1994, p.22.