¿Está bien que un profesor o profesora desarrolle un programa sobre las cosas que le importan de manera personal en vez de trabajar sobre los temas objetivamente importantes? Sí, está bien, es incluso preferible, ya que ofrecerá de sí lo más valioso y trabajado. No importa decirlo todo, importa decir algo. Pretendiendo abarcar mucho terminamos diciendo nada. Se trata de meter a un grupo de personas en la experiencia del pensamiento, de contagiar elaboración, no de hacer un resumen de temas valiosos en forma universal y descomprometida. Debemos apoyarnos en esa experiencia que fue central para nosotros, como una invitación a un juego, ¿venís? Es el amor por las cosas reales que nos importan, es el amor también por el alumno, por el otro pensante (que es también amor por uno, amor por el pensamiento, no una virtud moral sino una necesidad vital) el que resulta efectivo en el contagio del arte de pensar.

Además, entrando en una experiencia de pensamiento de calidad, cualquiera sea el tema o el estilo, se cumple con el objetivo principal, que es el de hacer accesible e interesante esa experiencia. Tenemos mucha más chance de lograr hacer esto si ponemos en juego la fuerza poderosa de nuestro interés más profundo, y por el contrario cargamos con un lastre fatal si nos reducimos a temas de importancia objetiva pero carentes de verdad sensible personal.

¿Se puede pensar cualquier cosa? Sólo se puede pensar lo que interesa, se trate de lo que se trate. La filosofía no es un conjunto de contenidos, es una necesidad de explicar y crear, de comprender e inventar, una producción de sentido que sólo es posible si reconoce los elementos dados en las sensibilidades que intercambian al calor del diálogo.

Programa sobre ensayos, programa para pensar el arte, programa para pensar la televisión, programa para pensar haciendo premisas con palabras recortadas de los títulos de los diarios, programa para pensar la diferencia entre la mujer y el hombre, programa para pensar el crecimiento de un chico, programa para pensar leyendo cuentos, programa para pensar sintiendo la música, programa para pensar el diccionario, programa para hacer entrevistas de pensamientos a personas que quieren charlar con nosotros, programa para pensar a través de internet, programa para pensar a los animales, programa para pensar desde la ciencia. ¿Cuántos más podríamos inventar? Que cada uno acuda a su repertorio de temas, visiones, deseos, experiencias.