ucar-edSarmiento fue un activo defensor de la educación del pueblo. Durante su presidencia se ocupó de reunir información sobre el estado de la educación en el país; de ese modo podría orientar mejor su obra de gobierno.

Los datos obtenidos a través del Primer Censo Nacional fueron alarmantes.
Según informes de la época, Argentina tenía en 1869 1.877.490 habitantes. De ellos, sólo un 20 por ciento sabía leer y escribir.

Mirá estos cuadros: ¿Qué pudo averiguar Sarmiento?

Población que sabe leer, escribir o concurre a la escuela

Varones Mujeres Total
Saben leer 204.933 155.750 360.000
Saben escribir 186.132 125.879 312.011
Van a la escuela 44.490 37.680 82.170
Total 435.555 319.30

Población que no sabe leer ni escribir

Menores de 6 años 315.822
Mayores de 6 años que no saben leer 1.382.669
Mayores de 6 años que no saben escribir 1.431.321

En sus continuos viajes, Sarmiento se ocupó de conocer profundamente cómo eran los sistemas educativos de los países que él consideraba modernos. Su principal modelo fue Estados Unidos.

Ésta es Mary Mann, esposa de Horace Mann, Secretario del Consejo de Instrucción pública del estado de Massachussets.

Ésta es Mary Mann, esposa de Horace Mann, Secretario del Consejo de Instrucción pública del estado de Massachussets. Sarmiento conoció a ambos cuando era ministro argentino en Washington. Quedó admirado del sistema educativo de Estados Unidos. Mary Mann ayudó a Sarmiento a elegir maestras estadounidenses para que viajaran a la Argentina a enseñar su método a las futuras maestras de nuestro país.

Dicen que cuando le preguntaron a Sarmiento cuál era el libro más importante que había escrito entre toda su extensa obra, no lo dudó: "El Método de lectura gradual". Este libro tuvo un éxito tremendo en Chile, donde se imprieron 150.000 ejemplares a fines de la década de 1850.

El Método de lectura gradual


El propio Sarmiento decía: "Hacer fácil el aprendizaje de la lectura es abrir las puertas del tesoro de los conocimientos a millares que sin eso hubieran abandonado por ingrata la tarea".

¿Qué opinás de esta frase?

¿En qué consistía el método? Leé y te vas a enterar.

Años atrás, Sarmiento dio razones de la poca circulación que su obra tuvo en la Argentina. "Para hacer conocer sus ventajas -escribió en 1875 a Miguel Uliarte- era necesario recomendarlo al público, o introducirlo autoritariamente en las escuelas. Pero sucedía que el autor era jefe del Departamento de Escuelas de Buenos Aires y (como) había otros métodos de uso, debió considerar impropio, y acaso incompatible con sus funciones, preconizar su propia obra o hacerla adoptar". Agregó que "requería además, que los maestros adoptasen una nomenclatura artificial o técnica en el nombre que se da a las letras del alfabeto, llamándolas be, ce, de, fe, me, ne, etc y maestros tomados de aquí y de allá no están siempre dispuestos a oir razón, haciendo suyos los nombres usuales de efe, hache, jota, etc, que tanto embarazan y confunden a los niños".

Nuestros escolares de hoy bendecirían a quien les permitiera escribir como proponía Sarmiento. Así, por ejemplo: ¿Qe gusto tendrá el pan echo con esta arina falsificada?. O así: El año se compone de trescientos sesenta i cinco días i seis oras, qe al cabo de cuatro años acen un día entero.

Fuente: Ambas Américas Revista de Educación, Bibliografía y Agricultura, Nº6, Buenos Aires, septiembre de 1993, pág. 29.

Éste es el cuaderno de infancia de Sarmiento.

Éste es el cuaderno de infancia de Sarmiento.


¿Llegás a ver algo de lo que está escrito?

¿Qué útiles escolares habrá usado Sarmiento para escribir?

¿Sería más difícil escribir en esa época?

¿Por qué?